domingo, 26 de mayo de 2019

Cholula, Puebla

Como ya lo había mencionado en otra ocasión, en marzo de 2016 mi mamá y yo fuimos a Puebla a visitar a mi prima y su familia que vivían en Cholula. Desafortunadamente mi estado de ánimo en esa época no estaba del todo bien, además me preocupaba que mi mamá y yo estuviéramos viajando solas. Creo que por eso no pude apreciar del todo la experiencia de ese viaje.

La hospitalidad de mis familiares fue excelente y nos llevaron a diferentes lugares en unos cuantos días. Los primeros paseos que realizamos fueron ahí mismo en Cholula. Algo me explicaron sobre San Pedro y San Andrés Cholula, sin embargo no lo recuerdo con claridad.

Nos tocó viajar en época de cuaresma y pudimos apreciar varias tradiciones locales como las alfombras de aserrín colorido formando diversas figuras. También recuerdo que en las banquetas, junto a las puertas de las casas se observaba lo que parecía ser ofrendas florales; recuerdo que eran flores llamadas "pensamientos".

También nos llevaron al mercado de la ciudad y a otra calle donde había varios vendedores de frutas, verduras, flores, etc. No sé por qué no tengo fotos de esos momentos; puede ser por dos razones: me dio pena tomar fotos o no traía batería en la cámara o el celular.

Lo que recuerdo es que me sorprendí de que la mayoría de los productos que se ofrecían tenían precios muy bajos. En ese momento deseé vivir ahí para poder ir todos los días a comprar flores o adquirir frutas y verduras frescas a buen precio. En ese momento ya había cambiado mi alimentación a una basada en plantas; por una parte es complicado viajar y no poder consumir cosas locales o que están más accesibles por tener que estar revisando los ingredientes; y por otra en este viaje tuve la ventaja de llegar con familiares que se preocuparon por cubrir mis necesidades en cuanto a la alimentación.

También en aquella ocasión me hubiera gustado que nos acompañaran Carlos y mi papá para sentirme más tranquila y haber disfrutado mejor el viaje. Espero regresar en otra ocasión, aunque mi prima ya no vive ahí.









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Mi Tito ya está viejito, ya tiene 8 años. Sigue con su carácter huraño y siempre a la defensiva. "¿Quién te hizo tanto daño, Tito?"...